Villarreal 2 - Real Madrid 2 (liga, 4)
El Madrid se enfrentó a una turba disciplinada y decidida a tirar abajo la estatua ecuestre de Cristiano. Esa iconoclastia es propia del levante español. Los amarillos, excavaron túneles bajo el centro del campo del Real y asolaron una línea defensiva rígida y pasmada, en la que sólo Diego López se interpuso ante el desastre. Es bien conocido el contubernio general contra el club, y la semana de selecciones fue la mano blanda que descuartizó el 11 titular. Hubo entorno: Volvió a hablar el seleccionador -siempre dirigiéndose a un grupo de niños-, recitando su Yo acuso moralizante. Hubo dos semanas enteras de cuchicheos y viajes en clase preferente que han sido suficientes para volver a la prehistoria del fútbol Real. Y hubo, además, lo de ozil. Encontraron al alemán ahorcado en su celda y pasearon el cadáver por media europa, horrorizados por la quiebra del cisne especialmente los que nos quieren bien. Se adelantó el Villarreal y fue justo, y empató Bale –que abarca el mundo entero- y fue injusto. Vimos la eficacia sorda de Illarra y la energía bruta de Carvajal. (Un jugador arremangado, de esos que gustan). Y vimos lo de siempre: arreones, al contrario mejor plantado, el Madrid no juega a nada y a Isco reinar entre los sargazos. Con dos palos se le atasca el mecanismo a este equipo y existe una falla entre la forma y el fondo. No habrá más tiempo. Ahora, manda el rey bobo.
XI: Diego López; Carvajal-Ramos-Pepe-Nacho; Illarramendi (Khedira, m. 61)-Modric-Isco; Bale (Di María, m. 61)-Cristiano-Benzema (Morata, m. 75 ).
+: Goles: 1-1 (m.38) Bale; 1-2 (m.63) Cristiano Ronaldo
No hay comentarios:
Publicar un comentario